1-11-2021 Los abogados del estado de Texas comparecerán hoy ante la Corte Suprema para luchar por la prohibición estatal del aborto, que ha salvado a miles de bebés del aborto . Se enfrentarán a los abogados de Joe Biden, que quieren que el tribunal más alto de la nación bloquee la prohibición del aborto mientras continúan las demandas de Biden y la industria del aborto en los tribunales inferiores.
La Corte Suprema ya rechazó una solicitud de Planned Parenthood y las empresas de aborto para bloquear temporalmente la prohibición, pero los argumentos orales de hoy son la primera vez que SCOTUS evaluará una solicitud para bloquear la prohibición de esa manera. A principios de este año, la industria del aborto presentó su impugnación legal en Whole Woman’s Health v. Jackson . Una vez que este esfuerzo resultó infructuoso para bloquear la ley, la administración Biden dio el paso sin precedentes de desafiar la ley estatal en Estados Unidos contra Texas .
El tribunal no considerará la constitucionalidad de la prohibición del aborto directamente, pero examinará si Biden y las empresas de aborto tienen derecho a bloquear la prohibición en primer lugar, ya que la prohibición no requiere que los funcionarios públicos la apliquen, sino que se basa en la capacidad de los ciudadanos privados. para presentar demandas contra los abortistas y otras personas que ayudan a matar a los bebés por nacer.
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El director legislativo del derecho a la vida de Texas, John Seago, dijo a LifeNews.com que cree que la Corte Suprema decidirá por segunda vez no bloquear la prohibición.
“Somos optimistas mientras la Corte Suprema examina estos desafíos legales a la Ley de Latidos del Corazón de Texas. Los magistrados no solo han continuado mostrando moderación judicial al permitir que la ley continúe salvando vidas, sino que están comprometidos a tomar en serio estas cuestiones procesales y permanentes, a diferencia del tribunal de distrito federal ”, dijo. “Tenemos la esperanza de que los jueces aclaren que estos ataques legales actuales contra esta ley que salva vidas no son válidos”.
“Texas Right to Life continúa apoyando al equipo del fiscal general de Texas, que ha demostrado una y otra vez que el gobierno federal no tiene la autoridad para pedirle a un tribunal que bloquee una ley estatal simplemente porque la política difiere de sus propios compromisos ideológicos. El Departamento de Justicia no ha demostrado tener capacidad legal para presentar este caso, ya que la Ley de Latidos del Corazón de Texas no amenaza al gobierno federal con un daño irreparable ”, agregó.
Los funcionarios de Texas argumentan que la Corte Suprema no puede revocar la ley y debe bloquear la solicitud de una orden judicial temporal en su contra porque no están acusados de hacer cumplir la prohibición del aborto según las disposiciones de derecho de acción privada de la ley que permiten la presentación de demandas privadas. contra los abortistas y los que ayudan a matar bebés.
Aquí hay más:
En un escrito de 93 páginas , los funcionarios argumentaron que dado que la ley de Texas es aplicada por ciudadanos privados en lugar del gobierno estatal, ambas demandas se presentaron erróneamente en su contra. “Ningún funcionario ejecutivo estatal realmente hace cumplir [la ley]”, escribió Texas, “haciendo de la orden judicial un intento inadecuado de imponer una ley en lugar de una persona”.
Pero la administración Biden en su propia presentación judicial criticó ese mecanismo de aplicación como un “ataque descarado a la supremacía de la ley federal”, argumentando que “si Texas tiene razón, ninguna decisión de esta Corte es segura”.
Y un grupo de proveedores y defensores del derecho al aborto en un escrito separado instó al tribunal superior a rechazar la “estrategia cínica” de Texas para evitar la revisión judicial.
Los jueces Clarence Thomas, Samuel Alito, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett constituyeron la mayoría en la decisión de no bloquear la prohibición la primera vez.
El tribunal, en su orden , dijo que consideraría las siguientes preguntas: si “el estado puede aislar de la revisión del tribunal federal una ley que prohíbe el ejercicio de un derecho constitucional al delegar al público en general la autoridad para hacer cumplir esa prohibición a través de acción”; y pueden “los Estados Unidos entablar una demanda en un tribunal federal y obtener una medida cautelar o declaratoria contra el Estado, los jueces de los tribunales estatales, los secretarios de los tribunales estatales, otros funcionarios estatales o todas las partes privadas para prohibir la aplicación de la SB 8”.
Cuando el tribunal superior rechazó la solicitud anterior para bloquear la prohibición, la jueza Sonia Sotomayor disintió y dijo que la prohibición del aborto en Texas debería bloquearse mientras continúa la demanda. Ella llamó falsamente a la atención médica de matar bebés en abortos e hizo parecer que las mujeres embarazadas se ven perjudicadas si no pueden abortar, a pesar de que el aborto daña a las mujeres de muchas maneras y las madres que dan a luz experimentan más alegría y menos daño al mantener su vida. bebé.
“Sin embargo, la promesa de una futura adjudicación ofrece un frío consuelo para las mujeres de Texas que buscan atención para un aborto, que ahora tienen derecho a recibir ayuda”, escribió. “Estas mujeres sufrirán daños personales por retrasar su atención médica y, a medida que avancen sus embarazos, es posible que incluso no puedan obtener atención de aborto por completo”.
La Corte Suprema necesita solo 4 votos para aceptar revisar un caso, pero cinco votos para emitir un fallo, lo que significa que SCOTUS alcanzó esos dos umbrales tanto para revisar como para decidir dejar vigente la prohibición del aborto en Texas. En un fallo anterior sobre la solicitud de las empresas de aborto de Texas para bloquear la prohibición, la Corte Suprema dictaminó 5-4 para permitir que se mantuviera en su lugar, con el presidente del Tribunal Supremo John Roberts y los tres liberales de la corte disintiendo y diciendo que debería bloquearse.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, y su equipo de abogados dicen que el gobierno federal no tiene capacidad legal en el caso y no tiene derecho a revocar la ley de Texas porque no ha sufrido lesiones por ello:
Los tribunales federales no son “comisiones itinerantes asignadas para emitir juicios sobre la validez de las leyes de la nación”.
La demanda de Estados Unidos contra Texas es extraordinaria en su amplitud y consecuencias, y tiene un impacto en precedentes que han existido mucho más tiempo de lo que se ha reconocido cualquier derecho al aborto. Sin embargo, el gobierno federal solicita a esta Corte que aplique la “máquina de anulación ad hoc” que hace a un lado cualquier doctrina del derecho constitucional que se interponga en el camino del derecho al aborto.
Específicamente, le pide a la Corte que ignore (entre otras cosas) los requisitos de justiciabilidad, legitimación y una causa de acción reconocible, todo para que la Corte pueda alcanzar los méritos de la impugnación del gobierno al Proyecto de Ley 8 del Senado de Texas (SB 8). El Tribunal debería rechazar esta solicitud. Según la jurisprudencia vinculante, el gobierno federal no es adverso a Texas simplemente porque cree que una ley de Texas es inconstitucional. Y carece de legitimación porque no ha sido perjudicado por la SB 8. El gobierno federal no puede realizar un aborto, y la Constitución no le asigna ningún papel especial para proteger ningún derecho putativo al aborto.
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La audiencia se produce después de que una nueva encuesta encontró que la mayoría de los residentes de Texas apoyan la prohibición para proteger a los niños por nacer.
El Houston Chronicle informa que una nueva encuesta de la Universidad de Houston / Texas Southern University encontró que un sólido 55 por ciento de los residentes de Texas apoya la legislación que salva vidas, a pesar de la publicidad negativa masiva, las campañas de desinformación y la condena internacional .
Según la encuesta de octubre, el 55 por ciento de los tejanos apoya la ley, mientras que el 46 por ciento se opone. Curiosamente, el 23 por ciento dijo que cree que los abortos deben permitirse solo en casos de violación, incesto o amenazas a la vida de la madre; sin embargo, tres cuartas partes de esas personas también dijeron que apoyan la ley del latido del corazón, aunque solo permite excepciones cuando la vida de la madre está en riesgo, informa el Chronicle.
Desglosado por grupos raciales, el apoyo a la ley provida fue más fuerte entre los residentes latinos (58 por ciento), en comparación con los residentes blancos (55 por ciento) y los residentes negros (47 por ciento). Además, el 59 por ciento de los hombres y el 52 por ciento de las mujeres dijeron que apoyan la ley.
La división más marcada fue entre republicanos y demócratas, con un 74 por ciento y un 38 por ciento de apoyo, respectivamente. La mayoría de los votantes independientes (55 por ciento) también apoya la ley.
La prohibición del aborto en Texas ya ha salvado a miles de bebés del aborto .
Los investigadores de la Universidad de Texas en Austin encontraron una caída del 50 por ciento en los abortos en septiembre, en comparación con el mismo mes en 2020.
Las instalaciones de aborto informaron 2.164 abortos en septiembre de 2021, frente a los 4.313 de septiembre de 2020, según la nueva investigación. Eso equivale a 2.149 vidas de bebés.
Mientras tanto, los defensores pro-vida se están acercando a las mujeres embarazadas en todo Texas con compasión y comprensión, ofreciéndoles recursos y apoyo emocional para ayudarlas a ellas y a sus bebés. A principios de este año, los legisladores estatales aumentaron el apoyo para las madres y los bebés embarazadas y con hijos , asegurando que tengan recursos para elegir la vida para sus bebés .
Otras encuestas muestran que los estadounidenses apoyan la prohibición del aborto cuando el corazón del feto comienza a latir.
Una encuesta reciente de la Universidad de Saint Louis / YouGov encontró que el 56 por ciento de los habitantes de Misuri están de acuerdo en que el estado debería prohibir los abortos una vez que los latidos del corazón de un bebé por nacer sean detectables después de ocho semanas de embarazo, incluido el 57 por ciento de las mujeres. De manera similar, una encuesta de abril de la Universidad de Texas-Austin encontró que los tejanos apoyan una prohibición del aborto de seis semanas. Según la encuesta, el 49 por ciento apoya la ilegalización de los abortos después de seis semanas de embarazo, mientras que el 41 por ciento se opone.
Una encuesta nacional de Hill / HarrisX de 2019 también encontró que el 55 por ciento de los votantes dijeron que no creen que las leyes que prohíben los abortos después de seis semanas, cuando se detectan los latidos del corazón de un bebé nonato, son demasiado restrictivas.
Y las encuestas nacionales de Marist y Gallup encuentran consistentemente que la mayoría de los estadounidenses quieren que todos o la mayoría de los abortos sean ilegales.
Por LifeNews.com